Ingredientes:
Sal gruesa.
Preparación:
Quitamos tripas y cabezas a las sardinas y en un recipiente
preferentemente cilíndrico ponemos como dos dedos de sal gruesa, encima
estibamos una tanda de sardinas y cubrimos con sal gruesa, presionamos un poco
y vamos poniendo tandas de sardinas y sal gruesa, terminamos con una tanda de
sal y ponemos una tapadera con un peso encima para hacer presión. Dejamos
macerar durante dos meses preferentemente en la nevera, una vez pasado este
tiempo las podemos ir sacando conforme las vayamos a consumir, las lavamos a
chorro de agua, las abrimos y quitamos la espina separando los dos lomos y para
desalarlas un poco las podemos dejar unos minutos en un recipiente con agua,
seguidamente las secamos con un papel de cocina y limpiamos el lomo exterior
para quitar la piel con el mismo papel. Para la presentación podemos rociarlas
con aceite de oliva virgen extra y aliñarlas con ajo, perejil, etc. eso ya al
gusto. Como secreto profesional diré que una vez preparadas en el recipiente y
antes de meterlas en la nevera podemos tenerla toda la mañana en el recipiente
expuestas al sol, si es verano mucho mejor.
Este proceso es el mismo que para los boquerones, en este caso publico
las sardinas porque muchas personas ignoran que también se pueden anchoar
¿A las sardinas hay que quitarle las tripas antes de ponerlas en sal?
ResponderEliminarPurs claro, hija.
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